El único animal de la tierra que es caminante por naturaleza
es el ser humano, un caminante eterno.
Vamos siempre de camino, buscando respuestas,
conquistando montañas, llegando a la última página de un libro,
construyendo puentes, abriendo escuelas,
estudiando, amando, orando, sudando, esperando …
distintos tipos de caminos por los que transitamos.
Igualmente en relación a la fe,
los nuevos grupos religiosos y las nuevas sectas
¿No son personas inquietas por hallar respuestas esenciales?
Las crisis de fe y la indiferencia religiosa del mundo globalizado
¿no es la inquietud por nuevos espacios espirituales?
El rechazo de Dios y de las religiones
¿No es una negación a todo aquello que no puedo manejar
y que está fuera de mi propia subjetividad?
El rechazo de lo religioso fundado en la lejanía de Dios
¿No es desconocimiento de Jesucristo, Dios encarnado y cercano?
TU Señor, nos enseñaste a encontrar en el cristianismo
una respuesta cierta a las interrogantes y búsqueda
de nuevos caminos para el hombre de hoy.
Nos enseñaste Señor, a vivir la experiencia del camino,
peregrinos que desarrollen la actitud de búsqueda y creatividad,
esforzados en ir en permanente ascenso y compromiso
de todo lo que nos hacer crecer en humanidad.
Me queda la sensación que también hay algo que decir para los que se sienten autómtatas, que la vida no les deja espacio para soñar, ni para nada, los consumidos por sus esfuerzos en pos de algo que puede no motivarlos sino ser obligación de la que no se pueden o logran sustraer.
ResponderBorrar¿Cuántos que viven eso querrían un espacio donde decirlo?, un espacio donde arriegarse a mirar, pensar, y luego a hablar, a decir algo de sí mismos, de lo que viven, de lo que añoran pero querrían vivir, que en su hoy se sitúa muy por fuera de lo que están habituados.
Saludos