En el
artículo anterior hemos hablado de la realidad "aumentada" que ofrece el juego POKEMON GO, esa que logra una brutal
abstracción de la realidad logrando aislar a la persona de su realidad. Una
enajenación observable en una distracción y falta de atención por lo que pasa
en nuestro alrededor. Nada importa ni preocupa, las conversaciones son sobre
los logros del juego y los nuevos desafíos que presenta.
Este tipo de
juegos crea adictos, los encapsula y hacer que una persona pase horas tras la
pantalla. Olvida comer, cumplir con sus deberes… está alienado… “la realidad
aumentada” (explicada en artículo anterior) logró “abducirlo”, término relacionado
con un hipotético secuestro por parte de seres extraterrestres. Logra “abducirlos”,
mediante toda una parafernalia, otorgándoles cualidades, niveles de acceso,
premios, estatutos de poder y autoridad frente a los “perdedores”. Crea grupos
que comparten la alienación, reflexionan y hacen profundos estudios de cómo
deben mover sus dedos para captar mayores puntajes... así, queda poco tiempo y
energía para vivir la vida con otros y ayudar a otros.
Lo más
delicado es que va creando una “actitud floja frente a la vida”, por el juego
olvida deberes familiares, preocupaciones ciudadanas. Olvida de que vive con
otros. Lo único que vale es la realidad “virtual”, pero la realidad concreta la
olvida. No se preocupa de lo que pasa en su país, no opina de política, no
tiene un juicio social, no sabe de noticias ni de lo que pasa en su país… es un
“Alien”, un extraterrestre, está fuera de su realidad.
¿No le parece
peligroso que millones hagan esto? ¿Alguien busca “dopar” al pueblo con esto?
¿No conviene tener a millones buscando a POKEMONES y no buscando la justicia
social? ¿No es este el moderno “pan y circo” que los romanos daban al pueblo
para que los dejaran gobernar tranquilos? ¿No es este un estado mental socialmente
peligroso?
Debemos
reflexionar esto con los hijos y adultos fanáticos de POKEMON GO, para que no
se conviertan en "ALIEN", ese
extraterrestre de la película, que no tenía nada que ver con lo que pasaba en
la tierra. Alien, alienado... un
fenómeno que quita a personas inteligentes, su inteligencia. Les priva de su propia personalidad, racionalidad y que
anula su libertad.
Para concretar lo anterior, le invito a reflexionar sobre los seis ejes sociales críticos del juego de POKEMON:
1. Es un
juego de caza
Crea hábitos
de "pronta recompensa", de obtener rápidamente lo que se busca. Debes
tomar esas "cosas" y guardarlas en TU propiedad privada... no hay
esfuerzo creativo, más que ir por la vida caminando y lograr fácilmente un
producto. (le invito a ver mi artículo sobre la cultura de la caza v/s la
cultura de la siembra... aquí predomina la "caza", la sorpresa, la
violencia por conquistar, la carrera por dominar.
¿Cómo se expresa la cultura de la caza en nuestra
convivencia? Pragmatismo,
énfasis en los resultados; competitividad, lucha por demostrar que somos
mejores que el vecino; marketing fantasioso, mayor desarrollo del efecto e
impacto inmediatista; poca paciencia por personas con características
especiales (con mayor incidencia del hemisferio derecho, por ejemplo), etc.
2. Es
agresivamente competitivo
tienes que
descubrir estos "monstruitos" antes que los demás. Es la guerra por
ganar a otros, no tiene un gramo de sentido colaborativo. Es ganar, guardar lo
encontrado y defenderlo para que otros no te lo quiten. En este juego no
hay segundos lugares...
3. Es
preocupantemente Adictivo
Los
seguidores de este juego van como zombies con su teléfono apuntando al frente
de una realidad que solo ellos ven. Les crea una realidad virtual con grados y
premios, con estatus y poder imaginario... y se lo creen!! Por eso se hace adictivo...
4. Definitivamente es Alienante
Los ingenuos cazadores de pokemones entran a vivir en una realidad
virtual, ven las calles por sus teléfonos, se alejan del diálogo, salvo por el
propio teléfono, con otros que hagan lo mismo. Es una evasión bárbara... en
EEUU hay cientos de accidentes de cazadores de pokemones, cruzando calles en
forma imprudente, como casos de automovilistas que atropellaron y matan a
peatones. Es esencial en la vida no perder contacto con lo real o existente, y una interpretación incorrecta
de los sentidos podría llevarnos a una realidad inventada, virtual, imaginando
que existe más de lo que existe. Es lo que en filosofía se llama una mala
interpretación de los datos sensibles, una pobre cercanía con la realidad y los
problemas de ella, lo que nos puede llevar a acrecentar el uso de la
imaginación, que los escolásticos lo llamaban “fantasma”, que deriva en el
termino de “fantasía”, que es inventar una realidad o un objeto que no existe.
5. Es un ejercicio para no involucrarse
Es un ejercicio individual, para ganar, juntar, adquirir,
poseer más que los otros. Sabemos que estamos llamados a más, la vida nos exige
más, nos demanda participar, involucrarse, sentirse vivo, tener conciencia de
que nuestra vida requiere HONRARLA y el paso simple de esto es SABER QUE VIVIMOS,
no sólo vivir, sino VIVIRSE y RELACIONARSE sanamente con otros.
La enajenación pokemona nos desvincula, nos distrae
y quita atención al próximo. Es una “locura temporal”, pero locura al fin, ese
estado mental de aquel que no puede hacerse responsable de sus actos por la
falta de juicio, en este caso temporal.
6. Es socialmente Selectivo
Los pokemones aparecen en lugares donde haya alto consumo y poder
adquisitivo, evitan los lugares pobres... ¿quienes podrían comprar sus otros
juegos pagados? ¿A su empresa pokemona, que sector social le interesa impactar?
Le invito a
compartir sus reflexiones
¿Concuerda con las mías? En que podemos discrepar?...
dialoguemos… cacemos palabras, podemos crecer juntos…
winston