«Sólo 10 de los 193 países del mundo albergan a más de la mitad de las personas refugiadas. Unos pocos países se ven obligados a hacer mucho más de lo que les corresponde, sencillamente, por su proximidad a zonas de crisis. Esta situación es intrínsecamente insostenible y aboca a un sufrimiento y miseria intolerables a los millones de personas que huyen de la guerra y la persecución en países como Siria, Sudán del Sur, Afganistán e Irak», ha afirmado el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty. Para Shetty es hora de que los líderes políticos entablen un debate serio y constructivo sobre el modo de ayudar a las personas obligadas a abandonar sus hogares y que tan solo representan el 0,3% de la población mundial.
De acuerdo con Amnistía Internacional y cifras de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), los cuatro países que albergan a más refugiados son: Jordania, más de 2,7 millones, seguida de Turquía, más de 2,5 millones, Pakistán, 1,6 millones, y Líbano con 1,5 millones. La lista de 10 países se completa con Irán (979,400), Etiopía (736,100), Kenia (553,900), Uganda (477,200), República Democrática del Congo (383,100), y Chad (369,500).