Se acaba de aprobar en el Congreso chileno la Ley de Reforma Educativa.
Unos salieron protestando contra lo aprobado porque anula la libertad de educación.
Otros contentos imaginaban nuevas formas de hacer escuela y de trabajar por mayor justicia y equidad social.
Creo que todos coincidían en que era urgente hacer algo en la educación
chilena... La vieja escuela agonizaba.
chilena... La vieja escuela agonizaba.
¿Qué viene ahora?
Además de los reglamentos y procesos jurídicos y administrativos, creo que ahora viene la gran reforma, la pedagógica.
Si, no basta con pensar lo educativo, los grandes desafíos y cambios nacionales en relación al lucro, la selección y gratuidad... Se hace urgente pensar en los procesos pequeños, pero que son gigantes: lo que ocurre en el aula, la relación profesor- estudiantes. Allí se juega la reforma, allí se forman los ciudadanos que han de mejorar los desórdenes que sus padres hemos cometido. Allí se vive la inclusión y el reverdecer comunitario, allí se anidan los sueños personales y de sociedad que buscamos.